Lo reconozco: no soy una gran cinéfila. Para ser exactos, cuando alguien me dice que le encanta el cine, no solo recuerdo que una de las ultimas pelis que me gusto fue ‘A mitad del camino’ (que creo que vimos 3 persona mas y yo) sino que encuentro un montón de listas mentales que hacer durante la conversación incluyendo no solo la lista de la compra sino también los regalos de navidad incluso si estamos en febrero.
El caso es que detrás de esa flojera que me entra, no solo está que mi interés en el cine de la ex - Yugoslavia puntuado del 1 al 10 sea -100 y que las únicas películas que vea tengan final feliz (y de hecho considere seriamente el lobby a nivel Europeo para que haya una categorización por finales similar a la de por edades), es que cuando se trata de cine, tengo un secreto inconfesable: mis 5 películas favoritas.
v The Holiday, porque me encanto descubrir que Cameron Díaz no solo duerme con calcetines de esquiar (como yo) sino que se mete los pantalones del pijama por dentro (como… pues sí, también como yo, joooo).
v Love Actually, porque creo en el amor a primera vista, me encanta el chico que hace todas las cosas románticas posibles por Keira aunque este casada con su mejor amigo (yo que estoy soltera no tengo a nadie que haga tan solo una).
v Step Up: la trilogía. Como el Señor de los Anillos pero en versión baile callejero y secretismo. Porque, ¿quien quiere aceptar delante del mundo que le encanta una peli de adolescentes (ay, señor, a estas alturas), con baile (Mary Poppins versión siglo XXI) y con el chico malo convirtiéndose en bueno? Ni que decir tiene que el chico malo tiene uno de esos cuerpos que yo estoy convencida solo existe en las películas. Por eso es malo, porque yo todos los chicos buenos que conozco no tienen cuerpo para el pecado sino un cuerpo de delito (delito tiene que no te puedas agarrar a ningún musculo en condiciones).
Aunque para mis pelis igual no se necesitan palomitas, la foto me gusta igual |
v Made of Honour, porque me encanta que se descarte a un escocés como posible marido. ¿Te imaginas que se presenta a todas las fiestas en falda? Yo me pasaría el tiempo rezando para que su falda fuese más larga que la mía y por las mañanas mis tacones estuviesen todos tal y como los deje la noche anterior.
v Bridget Jones, porque le da el nombre a este blog, porque quiero un Mark Darcy y porque entre medias no me importaría que me entretuviese un Hugh Grant.
Asi que, aunque sin que sirva de precedente pienso ir a ver ‘The Help’, espero que la industria cine-basura de Hollywood me siga regalando durante muchos años retos intelectuales como los aquí expuestos.
Solo tengo una pregunta: ¿soy yo la única a la que le gustan estas cosas?
Lara Jones