14/6/11

5 comidas que los ingleses envidiarian

Hay un montón de cosas que mis padres no esperan de mí. En algunas tienen razón, como mi participación en Gran hermano, que está descartada, no solo porque posiblemente no sea lo suficientemente inteligente (aunque los hechos digan lo contrario parece ser que la mayoría son semi superdotados) sino porque yo en la soledad de la noche en lugar de hacer edredoning, duermo y eso no ayuda a la audiencia. En otras, la vida les está sorprendiendo agradablemente, sobre todo en cuanto a comida se refiere. Y es que después de toda una vida rehuyendo de las comidas más tradicionales (excluyendo las lentejas, el cocido y 4 platos más de cuchara) echo de menos:

v  Las croquetas, de las que siempre me pareció que la bechamel era víctima de una conspiración en la que el pollo le quitaba el glamour y la fritura la remataba. Como solidaridad con ella y, sobre todo, porque se me hacían bola, decidí no comerlas en casa y negarme a pedirlas en los bares (¿soy yo o la mayoría son de las de Hacendado congeladas?).  Ahora me pirrian.


v  La tortilla de patata con la que atesoro un trauma psicológico labrado en mi más tierna infancia cuando mi prima y yo pasamos un verano juntas y cenamos tortilla de patatas todas y cada una de las noches. 20 años en España no curaron la herida. Un año y medio en Inglaterra y me muero por una tortilla.


v  La sopa de pollo, de la que he llegado a la conclusión que es la versión prehistórica del agua con sabor a limón pero con tropezones. Por mucho que siempre me haya parecido una comida inconsistente, de preparación anti-glamour (¿alguien ha visto el look triste que tiene cuando está a mitad de cocción, con la pata de pollo y sin fideos?) y sosa, ahora me muero por la sopa de mi madre
Da gloria solo de verlo
.

v  La patatas fritas, que salvo las de McDonald’s (lo sé, lo sé, afortunadamente mi vida ultra sana me mantiene alejada de esos antros de perversión), jamás de han gustado. No sé si es que si se enfrían se quedan como chicle, el sabor en sí mismo o que no me parece que combinen con nada pero que no se puedan comer solas, pero sinceramente, patatas, nunca os amenazare con freíros. Ahora, cuando voy a casa, necesito una dosis ultra crujiente de mi Mama Jones.


v  La pasta, porque salvo en billetes de 50, o con unos profiteroles de postre que me ayuden a digerirla, me parece un elemento poco amigable. No sé si es porque la salsa siempre acaba en mi pechera o en mis bigotes, pero supongo que el elemento ‘no sin mi Crystal White’ enturbia la relación. Cuando no soy yo la que lavo, curiosamente, la cosa cambia.


v  Las sardinas, las mismas que me enviaron a urgencias porque una de sus conocidísimas y grandísimas espinas se me clavo en la garganta y porque mi miedo a morir joven y bella claramente me indico que intervención médica era necesaria.  Entre ese día y el día que mi hermana y yo fuimos a urgencias porque  llevo unos tacones imposibles el día anterior y se le agarrotaron los dedos, arrancamos sonrisas cada vez que nos ven por los pasillos. Desde que me he reconciliado con ellas los médicos de UK tiemblan.


Asi que mi madre está encantada ahora que puede ensayar para abuela conmigo diciendo ‘anda, hija, que te veo muy delgada’ mientras yo me relamo y ronroneo. Una pena que su único nieto maulle.

Lara Jones


5 comentarios:

  1. Hola Lara Jones, muy buenas tardes que de cosas tan interesantes nos transmites y me hacen reirme, que bien sienta eso.
    Primero decirte que yo tuve mi vena de quiero ir al gran hermano, pero mi otra vena sosa me lo impidió je je.
    También decirte que mi juventud me la pasé como tú, comiendo cosas que después no quería ni ver.
    Ahora con el paso del tiempo, cocino sano, sin grasas y si sal, aunque parezca sosa la cómida, las lenjetas me quedan de muerte, las tortillas de papas, las sancocho no las frío, y las croquetas de bechamel que buenas son pero no me la como fuera de casa.
    Es que de verdad esté post me encantó lo tiene todo. Y sobre todo la chispa Jone. Que es la más importante de todas.
    Un besazo bien grande y muy feliz día guapa.
    http://mary1975.blogs.elle.es/

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  2. Ayyyy!! qué rico todo!!!! me ha entrado un hambre y no puede ser que estoy a dieta!! quizá debería irme a London contigo mientras!!jajaja

    Besis!!

    www.mimundodecolores.blogs.elle.es

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  3. Uffff con las croquetas y la tortilla de patatas hemos topado, amiga! Junto con el jamón Serrano, se comenta que, si comes algunos de estos alimentos a las 12 en punto la noche del solsticio de veran acompañado de una cañita de cerveza bien tirada, verás automáticamente la cara de Dios, y tendrás suerte garantizada los próximos 7 lustros. Palabrita!

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  4. jaja que gracia! Yo mataria por las croquetas, el resto de las comidas y yo llevamos una relacion inconsistente y variable...

    POR CIERTO, SIGUE ABIERTO EL SORTEO DE UNOS PANTALONES DEL DISEÑADOR MOISES NIETO! SOLO QUEDAN DOS DIAS!


    lollipopcat.blogspot.com

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  5. Veo que todas comemos estupendamente! Me alegro!

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